jueves, 29 de enero de 2009

1255

Regreso, a veces parece tan simple,
a veces parece que siempre podré hacerlo
Rostros, a veces parece que el paso de los años no los afectará,
a veces puedo creer, con ellos, en la inmortalidad:
juveniles, fuertes y decididos.







In the back of a car, asleep in the back.

domingo, 25 de enero de 2009

autoengaño, cómo la vida se va y uno la deja

Mentriría si digo que los pasados -por lo menos desde hace un par de meses -han sido los días más feos, menos inspirados, burdos, sin-sentido de lo que va de mi vida. Mentiría -y no es mi intención -si digo que me siento satisfecho con lo logrado. Mentiría si digo que estoy donde quiero estar -o creo que debo estar -y no es mi intención.

Siento que estoy en un gran engaño perpetrado por mí mismo, lo único que me ha dado un poco de emoción en este período reciente -de nostalgia, de miedo y hasta de una felicidad macabra -ha sido darme cuenta, por un lado que el engaño en el que vivo es causado por mí mismo y, como ambientación de ello, una maravillosa canción de los Fleet Foxes (Ragged Wood) que he escuchado con insistencia, en el transporte, caminando, acostado, sentado, gritando la letra mientras camino o tomo café o...






...lie to mo if you will, at the top of Beringer Hill
tell me anything you want, any old lie will do
call me back to you...



Ha sido así, reiteradamente y a la fuerza, que me di cuenta que me estaba mientiendo y que cualquier cosa que hiciera o me dijera a mí mismo sólo era una estrategia, una forma de protegerme, para no darme cuenta que no estoy donde quiero, así, mientiéndome, autocomplacientemente a mí mismo.

Realemente lamento que no haya un video mejor, pero la canción por sí misma es buenísima.

jueves, 22 de enero de 2009

Fetiches

Yo usualmente no subo imágenes o videos o audios a este blog, pienso que no es tanto porque no
me gusten los blogs con multimedia, sino porque soy demasiado flojo para hacerlo.

Hoy subiré esta:



De abajo hacia arriba: Parker fuente, Zebra F-301, Zebra F.301 ultra y Zebra M.301 ultra

De repente me di cuenta que tengo una especie de fetiche con los bolígrafos y demás artefactos para escribir, en este caso, con cubierta de acero inoxidable. Es raro, yo normalmente desprecio esta clase de cosas, pero un buen día (ayer en la noche) me di cuenta que tengo varios y todos bien formaditos y en cajitas, siempre procuro que estén limpiecitos y con sus tintas al borde, la Parker sólo la uso para escribir en la Moleskine y el portaminas para rayar los libros que estoy leyendo, una de las dos zebras, la F-301, es la que ando trayendo en el bolsillo de la camisa y la F.301 ultra es la que uso para tomar notas en una libreta especial.

Cada cosa a lo suyo.

Por más que digan que los zurdos tendemos al desorden y que tenemos 'habilidades creativas y artísticas' yo no puedo evitar ser un taxidermista, todo a mi alrededor puede estar en desorden por mi indolencia, pero los archivos de mi compudatora, la música en mi iPod, mis libros y mis bolígrafos, deben estar bien organizados.

viernes, 2 de enero de 2009

Perorata sobre las traducciones

El otro día estaba mirando un programa me parece que en Travel & Living, era uno de esos programas donde muestran lo bello y fácil que es viajar y vivir en otro país (siempre y cuando tengas mucho dinero disponible). Lo curioso de este programa -típicamente protagoniado por parejas estadounidenses o inglesas -era que este er protagonizado por un español bastante average. Un tipo semi calvo, bajo de estatura, bigotón y con un pésimo gusto para vestir (iba con una camiseta sin mangas, negra y ostentaba el nombre de-no-sé-qué banda de rock). En fin que el tipo iba viajando en Lisboa, si no recuerdo mal, de repente hizo un comentario como (parafraseo): "en Portugal se habla el portugués, pero también es bastante común escuchar el inglés, ya que, a diferencia de nosotros, nuestros vecinos ven las películas extranjeras en su idioma original". Yo pensé de inmediato, pero claro! Ese es el gran problema.

Lo que me llevó a recordar, de paso, que cuando estuve en aquella lejanía ibérica, me tocó vivir el estreno de Star Wars, y pude ver -con más dolor aún del que sintío Luke Skywalker cuando supo a un tiempo que Vader era su padre y éste le cortó la mano -que a este mítico personaje le llamaban 'Luke Trotacielos'. Ejemplos de este tipo de traducciones a ultranza hay muchos.

En fin, debo confesar que he parado de leer libros por las pésimas traducciones a las que nos enfrentamos constantemente. ¿Cómo sé que son pésimas? Sí, sí, ya sé que de otro modo no podría leer nada de autores como Per Olov (quien escribe en Danés) sin embargo, sí puedo darme cuenta de los estragos que hacen en traducciones al inglés. Pondré un ejemplo de la acutalidad:

Primera edición, original pues!
Autor: Kazuo Ishiguro
Año: 2005
Editorial: Faber and Faber
País: London
Título: Never Let Me Go

Edición Anagrama
Autor: Kazuo Ishiguro
Año: 2005
Editorial: Anagrama (Compactos)
País: Londres
Título: Nunca me abandones

Veamos. No hay problema en nada de la ficha técnica hay; sin embargo, un gran problema: el título. Quiero que, lectores, me ayuden a pensar si acaso estoy haciendo una mala interpretación de las cosas y el traductor -Jesús Zulaika -merece que le presente mis respetos y arrepentimiento. Leamos el título en inglés (idioma en que escribe Ishuguro):

Never Let Me Go

Ahora tratemos de hacer un breve análisis. El enunciador de la frase es YO, este yo le pide a un segundo, a un TÚ: no me dejes ir. Esto lo puedo interpretar de dos formas, 1) el Yo que enuncia la frase se va y le pide al Tú que evite que se vaya, es decir, el Yo es el sujeto de la acción (él se va). 2) en inglés se usa to let go usualmete para literalmente dejar ir e interpretativamente, para olvidar, o desaferrarse a alguien (como un novio, esposo/a que nos o mascota que nos deja; para un familiar o amigo que ha muerto y debemos dejarlo ir para que pueda descansar).

Ahora pensemos el título en buen castellano

Nunca me abandones

Me da la impresión, desde el inicio, que algo no encaja, que la idea no pasa tal-cual está expresada en este título, trataré de argumentar por qué:

1) una vez más hay un Yo que enuncia la frase, en este caso el Yo, le pide al Tú (que escucha la frase) que no lo abandone. Aquí el cambio radical de sentido. En este caso no es el Yo el que se va, sino que es el Tú quien lo hace. Es el Tú, el que escucha, quien es agente de la acción en este título. 2) Se puede argumentar, como lo hice en el caso del título en inglés, que to let go es una acción del Tú; sin embargo, si interpretamos esto así, literalmente, caemos en el error de terminar de un tajo con los diferentes sentidos que se ven presentes en el título original. Da la impresión de que el Yo hace una petición patética, quasi-post-mortem, para que el Tú no la olvide. Acaso el título pudo fácilmente ser: Nunca me olvides. O más fácil aún, Nunca me dejes ir.

Pienso que en este afán ultra-castizo, se comenten los errores más fatales y uno de ellos (no es mi problema definitivamente) es el concerniente a la subestimación de los lectores. Honestamente, si el traductor se esfuerza demasiado en lograr que un manchego paciego entienda a pie juntillas lo que un japonés criado en Inglaterra quizo decir con Never Let me go, está de verdad causándole un gran mal. Si yo quiero leer a Ishuguro, esto dispuesto ciertamente dispuesto, del mismo modo a pelearme con los sentidos que éste quizo dar. Ese es mi problema, el otro, no.

Me gustaría saber qué piensan los asiduos lectores de Ishiguro (G y el Fantasma) y el gran maestro del atraducción poblana (El guerrillero).